En el Perú, la gestión de las obligaciones tributarias es esencial para el funcionamiento del Estado y su relación con los contribuyentes. No obstante, pueden surgir desacuerdos entre la administración tributaria y los contribuyentes en la determinación de deudas. Ante esto, los contribuyentes tienen el derecho de cuestionar deudas que consideren incorrectas, lo que permite garantizar una administración tributaria justa y transparente, asegurando que sus obligaciones se gestionen de manera equitativa y conforme a la ley.
Dentro de las facultades que tiene el contribuyente para poder cuestionar deudas que consideren injustas o erróneas, están los siguientes mecanismos:
Si aún no está conforme con la decisión del Tribunal Fiscal y se ha agotado toda la vía administrativa, el caso puede ser llevado al Poder Judicial a través de un Proceso Contencioso Administrativo. Esta constituye la última instancia para impugnar una deuda tributaria, y debe iniciarse dentro de los tres meses siguientes a la notificación de la resolución emitida por el Tribunal Fiscal.
Se recomienda a los contribuyentes que desean impugnar una deuda tributaria seguir rigurosamente los pasos establecidos por la normativa vigente y reunir todas las pruebas y documentación necesarias para sustentar sus argumentos en cada etapa del proceso. Es aconsejable contar con el apoyo de un especialista en tributación, ya que estos procedimientos pueden ser complejos y demandar un conocimiento técnico especializado.