PRECEDENTE SUNAFIL: NO ASIGNAR OCUPACIÓN EFECTIVA, VULNERA LA DIGNIDAD DEL TRABAJADOR
Publicado el: Mayo 27, 2024
La Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (SUNAFIL), a través de la Resolución de la Sala Plena N° 004-2024-SUNAFIL/TFL ha establecido un nuevo precedente administrativo de observancia obligatoria respecto a la vulneración de la dignidad de los trabajadores. Este precedente se centra en situaciones donde no se asigna ocupación efectiva a los empleados, lo cual constituye un acto de hostilidad. A continuación, exploraremos los principales aspectos sobre este nuevo precedente.
¿Qué es el derecho a la ocupación efectiva?
El derecho a la ocupación efectiva se refiere a la obligación del empleador de proporcionar tareas y funciones a sus empleados conforme a sus capacidades y al contrato de trabajo. Este derecho es esencial porque no solo se trata de recibir una remuneración, sino también de desarrollar capacidades profesionales y personales. La ocupación efectiva permite a los trabajadores cumplir sus expectativas profesionales y contribuir significativamente a sus proyectos de vida, promoviendo así la dignidad humana en el ámbito laboral.
¿Cómo puede vulnerarse la dignidad del trabajador según este precedente?
El sentido de la resolución señala que la dignidad del trabajador se vulnera cuando el empleador, de manera arbitraria e injustificada, decide no asignarle ningún tipo de tareas. Esta inactividad forzada impide el desarrollo profesional del trabajador atentando contra su dignidad, lo cual constituye un acto de hostilidad conforme al literal g) del artículo 30° del TUO de la Ley de Productividad y Competitividad Laboral (LPCL).
¿Qué tipo de infracción constituye no asignar ocupación efectiva a los trabajadores?
La no asignación de ocupación efectiva al vulnerar la dignidad de los trabajadores y constituir un acto de hostilidad, está tipificada como una infracción muy grave de acuerdo con el numeral 25.14 del artículo 25 del RLGIT.
Recomendación:
Es fundamental que las empresas aseguren la asignación de tareas a todos sus empleados de manera equitativa y constante. No solo se trata de evitar sanciones administrativas, sino de fomentar un ambiente laboral donde se respete y promueva la dignidad de cada trabajador. Implementar políticas claras de asignación de tareas y mantener una comunicación abierta con los empleados puede ayudar a evitar situaciones de inactividad profesional y fortalecer la moral y el compromiso del equipo de trabajo.